
En el ámbito de la maternidad laboral, el servicio de salud ocupacional desempeña un rol fundamental en la protección y bienestar de las trabajadoras embarazadas. La resolución N.º 374-2008-T establece pautas y directrices cruciales para abordar los agentes de riesgo que podrían afectar a las mujeres durante su gestación en entornos laborales.
Esta normativa busca garantizar que las empresas implementen medidas preventivas adecuadas, salvaguardando tanto la salud de las trabajadoras como el desarrollo saludable de sus bebés por nacer. A continuación, te presentamos los agentes de riesgo relacionados con la maternidad laboral y cómo abordarlos de manera adecuada.
¿Qué es la Resolución N.º 374-2008-TR?
La Resolución N.º 374-2008-TR es una disposición legal diseñada para salvaguardar la integridad de las trabajadoras embarazadas y lactantes en el lugar de trabajo. Esta normativa se enfoca en la identificación y mitigación de agentes de riesgo que podrían tener un impacto negativo en la salud de las mujeres y sus bebés.
Agentes de riesgo relacionados con la maternidad
Los agentes de riesgo relacionados con la maternidad constituyen una preocupación fundamental en el ámbito laboral, tanto para las mujeres embarazadas como para sus empleadores y el servicio de salud ocupacional.
Estos agentes pueden variar desde sustancias químicas y físicas hasta factores ergonómicos y psicosociales, todos los cuales podrían tener un impacto negativo en la salud de la madre y el desarrollo del feto. Por ejemplo, algunos de ellos incluyen:
Sustancias químicas
Las sustancias químicas presentes en el lugar de trabajo, como productos químicos tóxicos o carcinógenos, pueden tener efectos perjudiciales en la salud de la mujer embarazada y el bebé.
Por ello, es importante que las empresas realicen análisis exhaustivos de las sustancias utilizadas en el sitio y tomen medidas para reducir o eliminar la exposición a aquellas que puedan representar un riesgo.
Cargas pesadas
Durante el embarazo, el cuerpo experimenta cambios fisiológicos que pueden afectar la estabilidad de los músculos y las articulaciones, lo que hace que ciertas actividades, como el levantamiento de objetos pesados, sean potencialmente perjudiciales.
Por lo tanto, resulta fundamental que las mujeres embarazadas eviten cargar objetos pesados siempre que sea posible, y en su lugar, la empresa debe buscar alternativas más seguras para que ellas lleven a cabo sus tareas laborales.
Estrés físico y mental
¿Sabías que el estrés excesivo también puede aumentar el riesgo de complicaciones durante el embarazo? El embarazo es un período en el que el equilibrio emocional y la salud mental son de vital importancia para el desarrollo saludable del bebé y el bienestar general de la madre.
En ese sentido, las empresas deben tomar medidas para crear un ambiente de trabajo que promueva la salud física y mental de mujeres embarazadas y lactantes, como la implementación de programas de apoyo y la reducción de cargas de trabajo excesivas.
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Agentes físicos relacionados con la maternidad
Como ya sabemos, la seguridad y los derechos de una mujer embarazada en el trabajo es de suma importancia. Entre los aspectos a considerar se encuentran los agentes físicos que podrían representar riesgos para la salud de la madre y el desarrollo del feto.
A continuación, veremos algunos de los agentes físicos más comunes relacionados con la maternidad y cómo se pueden tomar medidas preventivas para garantizar un ambiente laboral seguro.
Ruido excesivo
La exposición constante a niveles altos de ruido puede tener efectos negativos en la salud auditiva de la mujer embarazada y también puede afectar al feto en desarrollo. Se recomienda que las mujeres eviten entornos ruidosos o utilicen protectores auditivos adecuados para minimizar la exposición al ruido.
Vibraciones
Las vibraciones repetitivas, como las causadas por maquinaria o vehículos, pueden aumentar el riesgo de complicaciones durante el embarazo. Igualmente, las mujeres embarazadas deben evitar la exposición a vibraciones excesivas y, si es necesario, se deben implementar medidas para reducir estas vibraciones en el entorno laboral.
Radiación no ionizante
La radiación no ionizante, proveniente de fuentes como dispositivos electrónicos y equipos de comunicación, podría tener efectos en el desarrollo del feto, por lo que es importante que las mujeres embarazadas se mantengan alejadas de fuentes de radiación no ionizante y que los empleadores tomen medidas para minimizar la exposición.
Temperaturas extremas
Trabajar en condiciones de temperaturas extremadamente altas o bajas puede ser perjudicial para las mujeres embarazadas. La exposición prolongada este tipo de temperaturas puede aumentar el riesgo de complicaciones, por tanto, se deben proporcionar condiciones de trabajo cómodas y seguras.
Campos electromagnéticos
La exposición a campos electromagnéticos, como los generados por equipos eléctricos y electrónicos, debe ser controlada para evitar riesgos potenciales durante la maternidad. Las empresas deben realizar evaluaciones de riesgos y tomar medidas para reducir la exposición a niveles seguros.
4 medidas preventivas según la Resolución N.º 374-2008-TR

1. Evaluación de riesgos
La evaluación de riesgos es un proceso fundamental para identificar las posibles amenazas a la salud de las mujeres embarazadas y lactantes en el lugar de trabajo. Esta evaluación debe ser exhaustiva y considerar todos los aspectos de las tareas laborales que puedan implicar riesgos potenciales y añadirlos en un plan para mujeres embarazadas.
2. Cambio temporal de funciones
El cambio temporal de funciones es una medida importante para garantizar la seguridad de maternidad en el trabajo. Esto implica que, si una tarea específica implica riesgos para la salud de la madre o el bebé, se debe asignar temporalmente una tarea diferente que sea segura y adecuada para su condición.
3. Pausas para descanso
Las pausas para descanso son esenciales para aliviar la fatiga y el estrés en las mujeres embarazadas y en período de lactancia laboral. Estas pausas les permiten cuidar de sí mismas y descansar cuando sea necesario para mantener su salud y la del bebé.
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4. Prohibición de trabajo nocturno
Para salvaguardar la salud de las embarazadas, la resolución prohíbe el trabajo nocturno durante el último trimestre del embarazo y durante el período de lactancia. Esta disposición es fundamental, ya que el trabajo nocturno puede afectar los ritmos biológicos de la madre y el feto, así como interrumpir la calidad del sueño y aumentar la fatiga.
Como ves, la Resolución N.º 374-2008-TR y la comprensión de los agentes de riesgo relacionados con la maternidad son fundamentales para garantizar la seguridad y el bienestar de las mujeres embarazadas y lactantes en el lugar de trabajo.
Hasta aquí, hemos visto la protección por maternidad como un aspecto esencial en el ámbito laboral, respaldado por la Resolución N.º 374-2008-T. Recuerda que esta normativa no solo reconoce la importancia de salvaguardar la salud y el bienestar de las mujeres embarazadas, sino que también refleja un enfoque integral hacia la maternidad.
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