
En los últimos años, diferentes instituciones y estudios han señalado que la industria pesquera está en un aumento constante por la demanda de sus productos. Una situación no menor, debido a que obliga a dicho rubro a trabajar mano a mano con la acuicultura.
En los últimos años, diferentes instituciones y estudios han señalado que la industria pesquera está en un aumento constante por la demanda de sus productos. Una situación no menor, debido a que obliga a dicho rubro a trabajar mano a mano con la acuicultura.
Este 30 de noviembre se celebra el “Día de la Acuicultura”, que involucra a todas las actividades, técnicas y conocimientos de crianza y cuidado de especies acuáticas, vegetales y animales. Un desafío que va en simultáneo con este aumento en la demanda y que busca al mismo tiempo lograr un desarrollo sustentable y en sintonía con el medioambiente.
En esta oportunidad hablamos con Pablo Santibáñez, Subgerente técnico comercial de Health & Nutrition de SGS en Chile, quien nos contó más en detalle sobre el auge de esta industria. “En la edición de 2022 de ‘El Estado Mundial de la Pesca y la Acuicultura’ (SOFIA, por su sigla en inglés) se señala que en 2020 el crecimiento de la acuicultura alcanzó un máximo histórico a nivel mundial. La producción de animales acuáticos en 2020 fue un 30% más alta que la media de la década de 2000 y se situó más de un 60% por encima de la media de la década de 1990, impulsada fuertemente por la acuicultura”, señaló.
Dicho crecimiento no ha pasado desapercibido en el país. Medios como Portal Portuario destacaron el crecimiento de las exportaciones nacionales y donde los productos del mar y la acuicultura son una de las áreas que más aumentaron su demanda. Sin embargo, este crecimiento debe abordarse con responsabilidad, por lo que la acuicultura surge como una respuesta a dicha preocupación, siendo incluso destacada en los Objetivos de Desarrollo Sustentable 2030 de la ONU.
“Hace una semana, el mundo alcanzó los 8 mil millones de habitantes y se proyecta que para el año 2058 seamos 10 mil millones de personas. En este escenario la demanda de proteína de alta calidad es crítica para la población en todos los países del mundo. En este sentido, la acuicultura ha tomado un rol protagónico ante la imposibilidad de extraer más pescados y moluscos de los océanos. La acuicultura, tiene un enorme potencial para ayudar a satisfacer la creciente demanda de proteína saludable y ecoeficiente”, agregó Santibáñez.
Siendo un país con más de 8.000 km de costa, garantizar el cuidado y preservación del mar debería ser una de nuestras prioridades, por ello el ejecutivo destaca que “Los principales desafíos para la industria pesquera y acuícola son -relacionados a la sostenibilidad ambiental-asegurar que los alimentos acuáticos se capturen de forma sostenible, que salvaguarden los medios de vida y se protejan los hábitats acuáticos y la biodiversidad. Por otra parte, relacionado al segundo gran desafío de asegurar la seguridad alimentaria, es alimentar a la creciente población mundial con proteína de alta calidad y ecoeficiente”.
“Como SGS aseguramos la calidad e inocuidad de los alimentos producidos, acompañando a la industria en la transformaciones y crecimiento de sus sistemas productivos, asegurando que los alimentos de origen marino cumplan con la demandas y necesidades de la población, siendo SGS un garante de calidad a nivel mundial para los alimentos producidos, tanto en análisis, inspecciones y certificaciones de éstos. En este sentido, los alimentos acuáticos contribuyen más que nunca a la seguridad alimentaria y la nutrición”, concluyó.