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¿Cómo medir la Huella de Carbono en productos digitales?

SustainabilityAugust 18, 2023
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En un mundo cada vez más interconectado, las actividades en línea tienen un impacto significativo en el ambiente, aunque a veces no sea tan evidente. De esta manera, medir y gestionar la Huella de Carbono digital se ha vuelto crucial para comprender el alcance del impacto y tomar medidas concretas para reducirlo.  

Desde el consumo de energía de los dispositivos electrónicos hasta el almacenamiento de datos en la nube, es fundamental adoptar prácticas más sostenibles para preservar nuestro planeta para las generaciones futuras. A continuación, veamos cómo medir la Huella de Carbono digital y tomar acciones para reducir nuestro impacto ambiental. 

¿Qué es la Huella de Carbono digital y cómo se mide? 

La Huella de Carbono digital es una medida de las emisiones de dióxido de carbono equivalente (CO₂eq.) y otros gases de efecto invernadero que se liberan como resultado de las actividades digitales.  

La medición de la Huella de Carbono digital implica considerar varios aspectos. Uno de ellos es el consumo de energía de dispositivos electrónicos cotidianos como computadoras y smartphones. Estos aparatos necesitan electricidad para operar y estar en línea, lo que genera emisiones de carbono.  

Otro punto clave es la cantidad de CO₂ liberada por los centros de datos que mantienen nuestros servicios en línea. Estos centros albergan numerosos servidores que trabajan de manera constante para brindar acceso a aplicaciones, sitios web y almacenamiento en la nube. 

Todo este procesamiento y almacenamiento de datos requiere una gran cantidad de energía, generalmente una parte de energía proviene de fuentes no renovables, lo que aumenta la Huella de Carbono digital. 

Por otro lado, para calcular el impacto ambiental de los hábitos digitales, existen herramientas y metodologías especializadas que pueden ayudarte a realizar estimaciones precisas.  

Estas herramientas consideran diversos aspectos, como el tipo de dispositivo que utilizas, el tiempo que pasas en línea, el tipo de conexión a internet y el consumo de datos que realizas. 

Por ejemplo, si usas una computadora portátil durante varias horas al día para trabajar o entretenerte, la herramienta tendrá en cuenta el consumo de energía de ese dispositivo específico. Del mismo modo, si empleas una conexión a internet que proviene de una fuente de energía renovable, esto se refleja en una Huella de Carbono digital más baja. 

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Impacto ambiental del uso de internet 

¿Sabías que el uso masivo de internet y las redes sociales ha generado un aumento significativo en el consumo de energía? Los dispositivos electrónicos, como las computadoras y los servidores, requieren una cantidad considerable de energía para su funcionamiento y para mantenerse conectados en línea. 

Además, los centros de datos, que albergan miles de servidores, consumen cantidades enormes de electricidad y pueden emitir grandes cantidades de CO₂ si su fuente de energía no es renovable. 

Se estima que estos centros de datos representaron el 0.8% del consumo global de electricidad en la última década (GSMA, 2020). Sin embargo, algunos estudios han calculado un consumo más alto, oscilando entre el 1.1% y el 1.5% (Belkhir y Elmeligi, 2018). Por tanto, se proyecta que en un futuro cercano podrían llegar a demandar hasta el 7% de la energía global (Cook et al., 2017). 

Por otro lado, ¿sabías que las tecnologías de la información (TIC) son responsables de aproximadamente el 2% de las emisiones de gases contaminantes que contribuyen al efecto invernadero? 

Los centros de procesamiento de datos utilizan aproximadamente 400 terawatts por hora (TWh) de energía cada año. Esta cifra anual de consumo energético supera el de muchos países alrededor del mundo (Masanet et al., 2020), lo que contribuye en un 0.3% a las emisiones totales globales de CO₂. Al sumar estas emisiones con las generadas por las TIC a nivel mundial, se convierte en uno de los sectores más contaminantes a nivel global. 

Un aspecto clave para analizar es la ubicación de los centros de datos, ya que esto tiene implicaciones geoestratégicas. La región de Asia Pacífico alberga la mayoría de estos espacios (95), seguida por Estados Unidos y Canadá (79). Juntas, estas dos regiones representan el 72% del total. 

En contraste, Europa alberga el 24% y Latinoamérica solo el 4%. Estados Unidos y China, por supuesto, ocupan el primer y segundo lugar en términos de disponibilidad, con 69 y 31 centros respectivamente (Christian, 2018). 

¿Cómo reducir la Huella de Carbono digital? 

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Reducir la Huella de Carbono digital es esencial para mitigar el impacto ambiental negativo. Una de las estrategias clave es el uso de energía renovable para alimentar los centros de datos y otros dispositivos electrónicos. Además, las empresas pueden optimizar sus servidores y data centers para que sean más eficientes en términos energéticos. 

¡La participación de todos es esencial! Pequeñas acciones suman un gran impacto. Por ejemplo, puedes evitar dejar el cargador del celular enchufado cuando no esté cargando, ya que esto conlleva un consumo "vampiro" innecesario de energía. También es importante evitar conectar el celular a la carga si la batería ya está al 100%. 

Métodos sencillos para reducir las emisiones en la vida digital cotidiana: 

  • Reducir el streaming de video: Esta opción puede ayudar a reducir la carga energética y ambiental, ya que representa el 75% del tráfico de datos mundial. Además, la producción de los videos y el funcionamiento de centros de datos también contribuyen a este impacto. En cambio, la descarga de contenido consume menos energía.
  • Reproducir canciones como archivos de audio en lugar de transmitirlas como video en YouTube o ver el video con una resolución más baja.
  • Deshacerse de los aparatos viejos: Cuando los desechamos adecuadamente, permitimos que sean reciclados y reutilizados en lugar de terminar en vertederos, donde pueden liberar sustancias químicas nocivas para el medio ambiente.
  • Vaciar regularmente el buzón de correo electrónico para reducir el almacenamiento de datos.
  • Usar redes WLAN en lugar de redes móviles.
  • Utilizar un mix de energías renovables (fotovoltaica, hidroeléctrica, eólica, biomasa). 

La responsabilidad de las empresas y usuarios 

Las empresas tienen un papel crucial en la reducción de la Huella de Carbono digital. Pueden adoptar prácticas sostenibles, como utilizar energía renovable para sus operaciones digitales y optimizar la infraestructura tecnológica para maximizar la eficiencia energética. 

Por otro lado, los usuarios también pueden contribuir adoptando hábitos más conscientes. Pequeñas acciones, como reducir el envío de correos electrónicos innecesarios, eliminar archivos y datos no utilizados, y utilizar servicios de almacenamiento en la nube con políticas sostenibles, pueden marcar la diferencia. 

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Beneficio de la reducción de la Huella de Carbono digital 

La reducción de la Huella de Carbono digital tiene un impacto positivo en la lucha contra el cambio climático. Al adoptar prácticas más sostenibles, podemos disminuir significativamente las emisiones de CO₂ asociadas con las actividades digitales. 

Además, reducirla también puede ayudarnos a crear conciencia sobre el impacto ambiental de la tecnología y fomentar un cambio cultural hacia la sostenibilidad. 

El futuro de la Huella de Carbono digital 

El futuro de la Huella de Carbono digital está estrechamente ligado a las tendencias tecnológicas emergentes y a las políticas ambientales que se implementen. Se espera que la eficiencia energética en los centros de datos y dispositivos electrónicos mejore con el tiempo. 

Igualmente, es probable que haya una mayor conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad en la industria tecnológica, lo que podría llevar a la adopción generalizada de prácticas más ecológicas. 

Como ves, la Huella de Carbono digital es una preocupación creciente en el mundo moderno. A medida que nuestras vidas se vuelven más digitales, también lo hacen nuestras responsabilidades ambientales. Por tanto, medirla y reducirla es fundamental para lograr un futuro más sostenible. 

Hasta aquí, hemos visto qué es la Huella de Carbono digital y cómo medirla. Recuerda que es tarea tanto de las empresas como de los usuarios tomar medidas concretas para minimizar el impacto ambiental de nuestras actividades en línea.  

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